Cobra Kai es una serie adquirida por Netflix en 2020 (Luego de comprar los derechos a YouTube) que viene a ser la secuela de la saga de películas ochenteras: “Karate Kid”. Para todos los que crecimos viendo las aventuras de Daniel Larusso vs su mayor rival, Jhony Lawrence, Cobra Kai es un guiño a la cultura pop y al rock de los 80s y 90s puesto que parte de su banda sonora se basa en reconocidas bandas como: Guns N Roses, AC/DC, Nirvana, Queen, entre otras joyas.
Asimismo, Cobra Kai no sólo trae recuerdos de las buenas canciones de rock de los 80s y 90s, que aún suenan hoy en día como himnos, si no también puede acercar dicho material a las nuevas generaciones dado que la serie también mantiene algunos romances escolares (que tienen como fondo alguna canción de los 80s o 90s) que pueden atraer la atención de los más jóvenes a este contenido. Por ejemplo, cómo no recordar aquella escena donde Jhony Lawrence le indica su joven pupilo Miguel Díaz lo siguiente:
– Y cambia ese tono de llamada, dice Lawrence. Consigue algo de Guns N ‘Roses o algo así.
– ¿Qué es … Guns N ‘Roses?, pregunta asombrado su pupilo Miguel Díaz.
– Voy a fingir que no dijiste eso, indica un indignado Lawrence.
Sin embargo: ¿Cómo Cobra Kai logró disponer de todas las canciones que podemos escuchar a lo largo de sus dos temporadas? Pues la respuesta es mediante una cesión por dichas obras por parte de los sellos discográficos que tienen los derechos patrimoniales de estos éxitos como “Welcome to the Jungle” de Guns N´ Roses (Geffen Records) o “Highway to hell” de AC/DC (Atlantic Records).
Este acuerdo parece un negocio bastante rentable puesto que ambas partes salen beneficiadas. Aquí intentamos explicar algunos de los posibles motivos por los que un acuerdo entre ambas partes era beneficioso:
- Cobra Kai tiene una atmósfera que evoca las películas de Karate Kid, famosas en los años 80s y 90s, por lo que necesitaba de canciones que hagan que el público consumidor de esta serie pueda recordar dichas épocas con facilidad.
- El mercado del rock de los 80s y 90s parece haber cedido su posición en los rankings internacionales a otros géneros más populares de hoy en día donde las empresas que poseen los derechos de muchas canciones, que nos traen nostalgia de esos años, necesitan generar más regalías.
En ese sentido, no es un mal negocio que ambas partes lleguen a un consenso de celebrar un acuerdo para crear una relación jurídica, llámese contrato, mediante el cual los sellos discográficos ceden el derecho de estas canciones a una serie que recuerda estas épocas y pueda usarlas para atraer más seguidores o fanáticos.
El acuerdo parece ser exitoso para ambas partes puesto que desde Cobra Kai se hizo popular durante el 2020, muchos sellos discográficos han visto aumentar sus regalías por canciones que recuerdan a los 80s y 90s puesto que el número de búsquedas en Spotify, Apple Music, entre otros servicios de Streaming, ha aumentado de forma considerable.
Ahora, muchas distribuidoras y/o productoras de películas suelen solicitar canciones por encargo a bandas o grupos musicales, por ejemplo, un caso muy conocido es la canción “I dont want to miss a thing” interpretada por Aerosmith, hecha específicamente para la película “Amageddon” en 1998 y compuesta por Diane Warren (Conocida compositora de Cher y Celine Dion), o el caso de la canción “Eye of the tiger” interpretada y compuesta por la banda Survivor para la película “Rocky III”. Esta última canción fue solicitada personalmente por Sylvester Stallone quién inicialmente pensó en usar la canción “Another one bites the dust” de la banda Queen para “Rocky III”; sin embargo, los costos por cesión de dicha canción eran altísimos. Sylvester Stallone no se equivocó al confiar en Survivor puesto que “Eye of the tiger” se volvió el himno del famoso personaje: “Rocky Balboa”.
En el caso latinoamericano, “Al otro lado del río” de Jorge Drexler, fue compuesta por encargo para la banda sonora de la película “Diarios de Motocicleta”, la cual narra la travesía de Ernesto “El Che” Guevara por Latinoamérica, y tal fue su repercusión que ganó el Óscar a Mejor Canción en 2005. De esta forma se convirtió en la primera canción en español en ganar dicho galardón. Esta canción se volvió incluso más popular que la película por lo que con esto resaltamos la importancia de las bandas sonoras en una serie o película pues pueden llegar a determinar su éxito comercial o aumentar el número de seguidores de una serie o película.
En ese sentido, hay una necesidad de elaborar herramientas contractuales como las siguientes:
- Para el caso de obras por encargo podríamos usar un contrato de prestación de servicios dónde se pida al artista elaborar una canción específica para una serie o película asimismo colocar una cláusula dónde el artista ceda los derechos patrimoniales al productor y/o distribuidor qué está pagando por la obra mediante una contraprestación. En el caso peruano tenemos como ejemplo la conocida canción de Mar de Copas “Un día sin sexo”, compuesta por encargo para la película del mismo nombre del año 2003.
- Para la cesión de canciones ya creadas a series y/o películas, podríamos usar un contrato de cesión de obra audiovisual dónde se ceda por un tiempo determinado contenido por parte de un artista. Otro ejemplo peruano viene a ser la canción “Máquina” de la banda de rock nacional Cuchillazo, la cual fue seleccionada personalmente por el productor y guionista de la serie “Misterio”: Aldo Miyashiro, para que sea la canción principal de dicha serie. Hoy en día, para muchos seguidores de aquella mítica serie emitida por Frecuencia Latina en el año 2005 con sólo escuchar “Máquina” de Cuchillazo, recordamos con ahínco dicha serie.
En conclusión, mediante la presente nota intentamos dar un alcance de la importancia de las bandas sonoras en los medios audiovisuales y cómo muchas veces toman una importancia igual e incluso mayor a la serie y/o película a la cual acompañan. Otra recomendación, vean Cobra Kai si quieren recordar un buen momento de rock de antaño.
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