INTRODUCCIÓN
“La Casa de Papel” es, a estas alturas, la serie española más exitosa de todos los tiempos, posee un potente imán que lleva a los televidentes a cruzar sus capítulos de manera adictiva. Son varias las razones que encuentro a su éxito. Una de ellas es la construcción de los personajes. El Profesor (personaje interpretado por Álvaro Morte), quien dirige un atraco contra la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre española, ha sido diagramado de modo tal que posee una inteligente personalidad que calza con su biotipo, otorgándole una capacidad especial para apoderarse de cada una de las escenas en las que participa.
Precisamente es este el personaje el que, en una memorable escena, reflexiona en torno a la existencia de una historia de buenos y malos, donde se juzga a bandas criminales, pero no a instituciones que actuarían como tales. Así, ejemplifica su posición señalando que el Banco Central Europeo, amparado en el principio de liquidez, emitió dinero sin respaldo, a favor de los bancos, en los años 2011 (171 000 millones de euros), 2012 (185 000 millones de euros) y 2013 (145 000 millones de euros). Se beneficia a los ricos, en desmedro de los pobres, sentencia.
El presente artículo tiene por objeto reflexionar brevemente alrededor de esta crítica al rescate europeo al sistema financiero español que emana de la “La casa de papel”, a fin de que podamos saber si es que dicha crítica tiene sustento o no.
DESARROLLO
Desde el año 2008, el país ibérico se vio inmerso en una crisis financiera cuya gravedad condujo al rescate del año 2012, con una millonaria inyección de dinero público. La línea de crédito fue de hasta 100.000 millones de euros de uso exclusivo para el sistema financiero.
Ahora bien, el Gobierno de España no hace el rescate para “robar”, sino para evitar un colapso financiero que hubiese perjudicado al país. Incluso, siendo insuficiente su capacidad, debió acudir a Europa, que entregó buena parte del dinero requerido al Fondo de Restructuración Ordenada Bancaria (FROB) creado por el ejecutivo español. El apoyo prestado al sistema financiero no fue solo de liquidez (como señala el Profesor), sino también de capital.
Esto trae a colación aquella máxima de origen inglés “too big to fail” (en castellano, «demasiado grande para quebrar»), un concepto económico que describe la situación de un banco o de cualquier otra institución financiera cuya quiebra tendría consecuencias sistémicas desastrosas sobre la economía y que, por consecuencia, es necesario rescatar por los poderes públicos para evitar que ese riesgo de quiebra se realice. Es decir, se asume que no salvar a la entidad financiera de la quiebra podría generar una situación de falta de capital que afectaría a la economía en su conjunto.
Sin lugar a dudas, subyace al tema un riesgo moral, que puede llevar a que el sistema financiero de un país adopte decisiones a sabiendas que, en caso algo salga mal, serán otras personas las que soporten las consecuencias de los riesgos asumidos. En el caso concreto de la crisis española, resulta claro que el sistema financiero habría incurrido en riesgo moral, pues el gobierno dispuso que los bancos y cajas que solicitasen ayudas públicas debían cumplir con hacer ajustes tales como: suprimir oficinas, reducir planillas, así como controlar el sueldo y los bonos de ejecutivos.
Asimismo, la crisis derivó en ajustes presupuestarios en España que afectaron al público en general, pues incluyeron rebajas en el salario de los empleados del sector público y el congelamiento de las pensiones.
En consecuencia, salvando algunas imprecisiones, lo señalado por el Profesor no es ajeno a la realidad.
CONCLUSIÓN
De ninguna manera podríamos avalar las acciones que emprende la banda dirigida por el Profesor en la serie “La casa de papel”. La violencia, la extorsión, el secuestro y el empleo de armas no resultan justificables de ninguna forma.
Sin perjuicio de lo señalado, la crítica que emana de uno de los personajes de la “La casa de papel” contra el sistema financiero europeo posee un correlato real.
Por otro lado, no se trata de una crítica aislada en la serie, pues hay un sistemático interés en mostrar el atraco como un golpe al sistema. No en vano los mamelucos que usan los ladrones son rojos. Asimismo, el público apoya el atraco en determinados pasajes de la serie.
Por otro lado, no es gratuito que la hermosa canción de la serie, “Bella Ciao”, haya sido un cántico italiano de resistencia contra el orden establecido. Por último, visto bien, el título de la serie, “La casa de papel”, resultaría polisémico, pues alude tanto al lugar de fabricación de la moneda, como a la fragilidad de aquellos que encarnan la resistencia, acaso representando de forma equívoca a una mayoría descontenta con el accionar del sistema.
Fuente de la imagen (*): https://imagenes.canalrcn.com/lomaslike/la-casa-de-papel-tercera-temporada.jpg?Xs3wR9YQwiCsWpG._Ssjvo.9i5SgzZuQ